11 Sep Una bandera blanca en la torre de Santa María anuncia la ordenación sacerdotal de Miguel Ángel Palacios
Desde ayer sábado 10 de septiembre los ciudadanos de Guareña comprueban mirando hacia la torre del majestuoso templo de Santa María, ondear una bandera blanca. Eso significa que desde la parroquia se anuncia al pueblo una nueva ordenación sacerdotal. Será el próximo domingo 18 de septiembre cuando se ordene sacerdote Miguel Ángel Palacios Pino (Miajadas, 22 de junio de 1995).
En la bandera blanca figura un Crismón, monograma o abreviatura compuesta por las letras «X» y «P» entrelazadas, iniciales de Cristo. Lo pintó Miguel Ángel con pintura acrílica. Dice que el cristograma es uno de los signos más antiguos de la Iglesia, de arte paleocristiano, «iniciales de Cristo en griego, la lengua más antigua que empleaba la Iglesia en sus celebraciones. En el monograma vemos una especie de equis (la «ji» griega) y una especie de P («ro griega»), las dos primeras letras de la palabra de Cristo (XPISTOS)», explica Palacios.
Profundiza el diácono que «Cristo» significa «ungido» y, como en la ordenación, cuyo rito principal es la imposición de las manos del obispo y la oración, otro de los ritos es la unción de las manos con el Santo Crisma, aceite perfumado y consagrado, sería ungirle e investirle para una «misión de Dios», al igual que «en el Antiguo Testamento se le ungía las manos a los Profetas, a los Reyes y a los Sacerdotes», dice.
Miguel Ángel se prepara para ser sacerdote de Jesucristo, el Ungido de Dios, «para continuar la Misión de Cristo en el mundo», nos explica.
«Será una bella ceremonia en la que todo el pueblo se está implicando para acompañarme ese día. También en estos días previos, siento la compañía de mi familia y de muchos sacerdotes, especialmente aquellos que me impondrán la casulla y que más han vivido de cerca mi vocación y mis primeros pasos hacia el ministerio sacerdotal. Tras los preparativos de estos días entraré en ejercicios espirituales para preparar especialmente mi corazón ante tal momento de gracia, pidiendo al Espíritu Santo que me confiera el Sagrado Orden y que me configure cada día más con Cristo Pastor», indica Miguel Ángel Palacios en la web episcopal.
Su Primera Misa Solemne en Acción de Gracias por el Sacerdocio tendrá lugar en la iglesia parroquial de Santiago Apóstol de Miajadas, el domingo 25 de septiembre a las siete de la tarde. La parroquia miajadeña también lucirá la bandera blanca.
Miguel Ángel Palacios Díaz y Luisa Pino Fabregat son sus padres, hosteleros de Miajadas. Y una hermana, María Luisa, tres años menos que su hermano primogénito a punto de ser sacerdote.
Este joven de 27 años confiesa que desde niño cuando era monaguillo, descubrió la vocación por el testimonio de otros cristianos, como son su abuela, tía abuela, religiosas y sacerdotes, especialmente del seminarista Francisco Torres, fue quien más le animó en los inicios hacia la vocación sacerdotal. Y quería llegar a ser cura y, «tomar el centro mismo del misterio de Cristo, que abraza constantemente a toda la humanidad y al mundo, más aún a toda la creación visible e invisible», según definición de la misión de los sacerdotes que dio Karol Wojtyla cuando era cardenal.
El futuro sacerdote está muy ilusionado y toda su familia también. Fue seminarista en Plasencia, estudiando Filosofía y Teología, y se especializó haciendo un Máster en Teología Dogmática en el ámbito de la Teología Patrística (la teología de los primeros siglos de la Iglesia). El 3 de octubre de 2021 fue ordenado diácono en la Catedral de Plasencia por la imposición de manos de monseñor José Luis Retana y destinado a Guareña para ayudar en la parroquia con el párroco Ismael Pastor González.
El obispo administrador apostólico de Plasencia Ciriaco Benavente Mateos, será quien le ordene sacerdote el próximo domingo 18. Están invitados muchos sacerdotes y diáconos. Miguel Ángel está muy contento en Guareña, «aquí hay gente muy acogedora que quiere mucho a la iglesia y, especialmente, a sus sacerdotes; veo a gente muy implicada». Sobre la juventud del pueblo dice que «está muy necesitada de buenas noticias, de acompañamiento…».
La bandera blanca ondea desde lo más alto de Guareña y desde lo más alto de la iglesia de Santa María en honor a Miguel Ángel Palacios, gracias al esfuerzo de Juan Juez y Miguel Carretero, quienes la instalaron ayer sábado por la tarde, bien apuntalada a uno de los extremos de la bóveda, en uno de los «moritos» que corona el campanario de Santa María.