25 Sep La diócesis en el encuentro de personas migrantes y refugiadas
Más de un centenar de fieles de la diócesis participó el domingo 24 de septiembre en la VIII edición del encuentro regional de personas migrantes y refugiadas que se celebró en el colegio Sagrado Corazón de Coria, bajo el lema Libres de elegir, migrar o quedarse.
Tras la recepción y las palabras de bienvenida de la organización y las autoridades locales, hubo un espacio lúdico con una yincana para niños y adultos por el casco histórico de la localidad. Seguido de la Eucaristía en la Catedral de Coria presidida por el obispo de la Diócesis de Coria-Cáceres, Jesús Pulido. En su homilía, el prelado recordó que Dios anuncia un mundo nuevo: “En el que los pobres tendrán hasta saciarse y los ricos pasarán hambre, que los poderosos que están en los tronos serán derribados y los humildes serán enaltecidos. El mundo al revés. Nadie se ha atrevido nunca a tanto, solo Jesús. Y además nos lo ha dicho de múltiples maneras”. Monseñor Pulido recordó a “los israelitas que se sentían y se creían hijos de Dios y dueños de la religión y consideraban a los extranjeros como los perrillos que se sientan a la mesa para recoger las migajas y Jesús les dijo que vendrían de oriente y de occidente y se sentarían en el Reino de los cielos mientras ellos se quedarían fuera. Así fue con los sacerdotes, los levitas, que se consideraban puros y Jesús les dijo que los publicanos y las prostitutas les precederían en el reino de los cielos, irían delante de ellos”.
Lo mejor de la jornada, comentaban los participantes, la convivencia. Un joven de Perú destacó que “Me pareció genial interactuar con hermanos de muchas culturas y naciones, nos divertimos…”. A su lado, desde Honduras, indicaron que era una oportunidad “para conocernos e integrarnos, a través de diferentes actividades”. Desde Venezuela valoraron el trabajo de la organización y a todos los que aportaron su granito de arena como voluntarios.
Principalmente, los asistentes procedían de América Latina, un participante español indicó que lo más satisfactorio era “ver a la gente contenta y feliz. Personas emocionarse en el taller al recordar expresiones de sus países”. También hubo espacio para próximos deseos, la de conseguir la participación de otra culturas, países y continentes como Marruecos o África.
Los actos llegaron a su fin con una comida de convivencia entre todos los participantes, voluntarios y organizadores y música con actuaciones.
El objetivo de este encuentro es «insistir en el derecho de las personas a poder permanecer en sus lugares de origen y poder tener unas condiciones de vida y trabajo dignos».