
13 Jun Iglesia en Plasencia: ‘Candelas’ (artículo publicado en la sección Liturgia)
A continuación les ofrecemos el artículo que bajo el título ‘Candelas’ sale publicado en el último número, el 629, de la revista diocesana Iglesia en Plasencia, dentro de la sección Liturgia, a cargo de don Miguel Ángel Ventanas, delegado de Liturgia y Animación a la Oración de la Diócesis.
Candelas
La liturgia contempla el uso de candelas (“candere” arder) o velas en múltiples oportunidades. Ya en los Hechos de los Apóstoles se narra que, cuando los primeros cristianos se reunían para la fracción del pan, «había muchas lámparas en la sala donde estaban reunidos» (Hch 20, 8). En la actualidad, y más allá de su función práctica, desplazada por el uso de la iluminación eléctrica, las velas revisten a la liturgia de un significado simbólico, como expresión de fe, fiesta, ofrenda, atención y presencia divina. Son un símbolo de Cristo, que se manifestó como la «luz del mundo» (Jn 8, 12), que nos mandó velar y mantener nuestras propias lámparas encendidas en espera de su venida. (Mt 25, 1-13; Lc 12, 35).
Los recién bautizados reciben una vela encendida desde el cirio pascual, para indicar que su vida ha sido iluminada por la gracia de Cristo.
Algo similar ocurre con la profesión religiosa, como símbolo de una nueva vida que nace merced a esa consagración plena a la vida en Cristo.
Sobre el altar se deposita el número de velas que sea necesario según el grado de celebración de la Misa o de la adoración eucarística. Siete en la Misa estacional del obispo como signo de plenitud.
Las velas pueden acompañar asimismo la procesión de entrada y la lectura del Evangelio o la plegaria eucarística.
De manera constante brilla una lámpara especial delante del sagrario, alimentada con aceite o cera, para indicar la presencia de Jesús sacramentado.
Cada domingo de Adviento se enciende una vela distinta alrededor de la corona para significar nuestra gradual preparación a la Navidad.
El 2 de Febrero y en otras celebraciones, marchamos en procesión con candelas encendidas para significar al que es “luz para alumbrar a las naciones”.
En el tiempo pascual y en otras celebraciones la luz del cirio simboliza a Cristo Resucitado.
Miguel Ángel Ventanas Franco
Delegado de Liturgia y Animación a la Oración