18 Feb Eladio Mozas Santamera, un hombre marcado por la Trinidad
Hoy martes, 18 de febrero, es el aniversario del nacimiento del Padre Eladio Mozas Santamera, fundador del Instituto de Hermanas Josefinas de la Santísima Trinidad y, con la ayuda de don Miguel Ángel Ventanas, delegado de Liturgia y Animación a la Oración y canónigo de la SI Catedral, prefecto de música, nos adentramos en su vida y obra.
El primer día de su encuentro con la luz en un pueblecito de Guadalajara, Miedes de Atienza (España), Eladio es bautizado en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. El calendario marcaba 18 de febrero de 1837. El deseo de conocer a Dios Trinidad y responder a su amor, lo envuelve en lo más profundo de su ser, desde sus años de estudiante y le acompañará toda la vida.
En diciembre de 1862 obtiene el Doctorado en Teología en la Universidad Central. Se ordena Sacerdote en Abril de 1865 y pasa a pertenecer a la Diócesis de Plasencia. En esta ciudad desarrolla una intensa vida sacerdotal: párroco de san Nicolás , profesor del seminario, canónigo penitenciario y director espiritual de las Religiosas Agustinas Recoletas de Serradilla, a quienes dirige 549 cartas de alto contenido teológico y místico y de gran belleza literaria.
Vive una época compleja. En el siglo XIX se fraguan transformaciones económicas, sociales y religiosas profundas. En la degradada España de Isabel II, ante el analfabetismo, la pobreza del pueblo, la increencia y los ataques a la Iglesia, crecen en Eladio sus ideales de regenerar a la sociedad. Dios le llama desde la historia, al mostrarle la postración de sus hijos, aviva en él la pasión por su gloria y le regala un Carisma.
Desde su fuerte experiencia de Dios, Eladio acoge en su corazón los retos y necesidades de su tiempo y funda el Instituto de Hermanas Josefinas de la Santísima Trinidad. Tras diez años de formación a las Hermanas Josefinas-Trinitarias para transmitirles el Carisma, el 18 de marzo de 1897, en Plasencia (Cáceres), a los 60 años de edad, Eladio recibe la llamada definitiva a ser «Cantor de la Gloria de la Santísima Trinidad», el gran amor de su vida.