28 May 200 parroquias de la Diócesis de Plasencia reciben una ayuda de 600 euros cada una
Una inyección para conferir liquidez de la que tirar para gastos ordinarios. Las 200 parroquias que integran la Diócesis de Plasencia –10 en la ciudad– han recibido una ayuda directa de 600 euros cada una de ellas por parte del Obispado.
«Como cualquier espacio que ha permanecido cerrado al público por motivo del confinamiento, que por tanto no ha podido continuar con su actividad ni recibir ingresos, las parroquias han visto su economía mermada durante este tiempo», afirma Antonio Luis Galán, vicario de Asuntos Económicos de la Diócesis de Plasencia.
Por eso desde el Obispado se ha aprobado una batería de medidas con las que ayudar a los párrocos a mitigar su falta de ingresos desde que el 14 de marzo se aprobara el estado de alarma hasta el pasado día 11 de mayo, cuando la entrada de Extremadura en la fase 1 permitió la reapertura de los templos.
El Obispado ha mantenido a sus 21 trabajadores durante los meses de confinamiento
«Desde entonces los fieles han comenzado a acudir de nuevo a las parroquias, con las garantías precisas como felpudo con lejía, mascarilla, gel y distancia de seguridad; pero aun así, la gente tiene miedo», reconoce Antonio Luis Galán.
Motivo por el que los ingresos que perciben las parroquias siguen siendo escasos. De ahí no solo la ayuda directa de 600 euros a cada una, sino también la exención del pago este año del canon del 10% que las iglesias entregan anualmente al Obispado y el ofrecimiento de un crédito de 3.000 euros sin intereses a las parroquias en situación más precaria. «Una ayuda que, hasta el momento, ningún párroco ha solicitado», aclara el vicario de Asuntos Económicos.
Además, el Obispado ha repartido 30.000 euros entre la decena de residencias de mayores que hay en la Diócesis, «para la compra de material de protección tanto para los residentes como para los trabajadores», y ha solicitado a los sacerdotes la entrega de donativos personales para ayudar a los colectivos más castigados por la pandemia.
Hasta el momento, los 81 sacerdotes en activo que tiene la Diócesis de Plasencia han sumado con sus aportaciones 15.000 euros. «Servirán para financiar proyectos de Cáritas para atender a los más vulnerables que no cuenten con subvención», detalla Antonio Luis Galán.
Respecto a sus propios empleados, «el Obispado no ha realizado ningún ERTE, hemos mantenido a nuestro 21 trabajadores: a los tres de la Catedral, a los cinco de la Casa Sacerdotal –a los que agradecemos el cariño con el que han estado cuidando de los sacerdotes– y a los 13 del propio Obispado». A pesar de que sus ingresos se han reducido también como consecuencia del cierre a las visitas tanto de la Catedral como de la iglesia de San Martín. «Espacios que no abrirán al público hasta que no se permita la movilidad entre las provincias, porque entendemos que no tiene sentido hacerlo antes», concluye el vicario de Asuntos Económicos de la Diócesis.