15 Jun Cáritas Diocesana de Plasencia: El «milagro del día a día» a través de voluntarios y beneficiarios
Con motivo del Día de la Caridad, en Iglesia en Plasencia, hicimos un importante análisis de la realidad de Cáritas Diocesana de Plasencia, que recogemos más abajo y lo hicimos con la voz de los que la viven día a día, tanto voluntarios como beneficiarios. También pulsamos la opinión del Delegado Episcopal, don Julián Martín Paniagua, y de don Ángel Custodio Sánchez, director de Cáritas Diocesana. También coincidiendo con la Semana de la Caridad.
Julián Martín Paniagua: “La Caridad es un compromiso fundamental como cristianos”
El Delegado Episcopal de Cáritas nos comenta que “descubrir a las personas que van creciendo a través del esfuerzo de los que forman Cáritas me parece que es uno de los objetivos fundamentales de nuestra labor de Caridad, porque la Caridad no es otra cosa que el Amor que transforma el mundo y el amor que transforma el mundo es transformando estas personas. Esto es lo que nos llena de esperanza para no cerrar los ojos a ver a las personas que tenemos a nuestro alrededor. Quiero hacer un llamamiento porque la Caridad es uno de los compromisos fundamentales que tenemos como cristianos y también aquellas personas que descubran lo que es fraternidad, el amor a las personas, la cercanía… Necesitamos más brazos, cabezas, corazones, piernas y ojos. Necesitamos muchas personas que voluntariamente, o como puedan, permitan que continuemos esta labor fundamental de Cáritas Diocesana y, por supuesto, también de nuestras Cáritas Parroquiales”.
Ángel Custodio Sánchez: “Aquí el milagro es ver cómo mejoran cada día estas personas”
“Lo importante dentro de Cáritas es el contacto con estas personas y el contacto de estas personas con los voluntarios, y yo lo soy. Este enriquecimiento no tiene valor, es inmejorable. Que te digan que en Cáritas han visto la luz, han visto las puertas abiertas y que eso permite dar luz a esas personas vulnerables. Son ellos mismos los que nos dicen que el hecho de estar con ellos, de escucharles, de acompañarles, es la mejor medicina para ellos, que nos dicen que en Cáritas ven que hay personas que están pendientes de ellos. Es cierto que llegamos a muchos sitios y hay muchos voluntarios, pero aquí no nos preocupan tanto los números como los hechos y eso tiene un valor inmejorable. Sorprende cómo mejora una persona en poco tiempo. No hay que esperar milagros. El milagro es éste, el día a día de estar con estas personas”.
*A continuación reproducimos el análisis de la Semana de la Caridad de Cáritas Diocesana publicado en Iglesia en Plasencia con testimonios de tres beneficiarios y una voluntaria.
Una semana para visibilizar la solidaridad
Entre el 29 de mayo y el 1 de junio, Cáritas Diocesana de Plasencia adelantaba (debido a que estos días se celebraban las Fiestas de Plasencia) la Semana de la Caridad, una actividad que ha servido para visibilizar el enorme trabajo solidario que se realiza en la asociación, vital en la Iglesia por sostener la Caridad. Durante cuatro días se celebraron actividades enfocadas a dar a conocer la realidad que viven muchas personas vulnerables. En el caso de Cáritas, es una agrupación rica en proyectos que cubren, prácticamente, todas las necesidades de las personas vulnerables y, les ayudan para cambiar de vida y poner esperanza. Así lo atestiguaban el último día tres de sus usuarios, que daban testimonio ante numerosas personas y muchos amigos de lo difícil que había sido caer en el pozo y de la importancia de la ayuda que le habían prestado desde Cáritas para mirar al futuro con el ojo de la “alegría”. Hoy, contagian alegría y capacidad de superación y suponen un ejemplo para otros.
La Caridad es, sin lugar a dudas, una de las virtudes fundamentales en el pensamiento cristiano. Es la necesidad de obrar, de compartir, de ayudar al más necesitado siguiendo el ejemplo de Jesucristo, que se puso al lado de los más débiles para transmitir al mundo
el Evangelio. Desde hace años, la máxima expresión de esta virtud en la Iglesia Católica es Cáritas, que en su estructura comprende a las organizaciones diocesanas (e interparroquiales) que luego dan cobijo a centenares de personas vulnerables. Es el caso de Cáritas Diocesana de Plasencia, cuya labor es fundamental para ayudar a todos esos individuos que un día perdieron la esperanza y que atraviesan por malos y duros momentos.Por eso, coincidiendo con la celebración del Día de la Caridad, Corpus Christi, este domingo, 11 de junio, se celebra la Semana de la Caridad, que en nuestra diócesis se celebraba la semana anterior debido a que en ésta coincidía con las fiestas de la ciudad.
Ha sido un completo programa de actos que ha visibilizado la actividad de la agrupación, la realidad de las personas vulnerables y la esperanza en la rehabilitación y en encontrar una salida. Bajo el lema elegido para este año ‘Tú tienes mucho que ver. Somos oportunidad. Somos esperanza’, nuestra diócesis ha buscado volver a sacudir las con-
ciencias y despertar la solidaridad y la compasión que vive cada persona, para así invitar a comprometernos con un estilo de vida que “transforme nuestro modelo de convivencia y lo haga más justo, solidario y fraterno”. Señalan desde la propia dirección de Cáritas Diocesana.Ha sido un programa en el que han tenido cabida actos muy variados, desde la exposición fotográfica con la que arrancaba la semana hasta la mesa de testimonios que la cerraba, una auténtica ‘bofetada’ de realidad. Pero una ‘bofetada’ de emoción y de esperanza al ver cómo a través del trabajo de Cáritas Diocesana y de la solidaridad de miles de personas, han podido reconducir sus vidas después de haber tocado fondo en muchos casos. Son Beatriz, Jennifer y Miguel Aparicio, pero pueden ser centenares de personas que, durante el último año, y van unos cuantos ya, han podido tornar esa desilusión en una sonrisa contagiosa.
La semana arrancó con la exposición fotográfica ‘Junt@s’, que se mantuvo expuesta del 29 de mayo al 3 de junio en el Centro Regional de Reinserción de Cáritas y que, lo más importante, contaba con el trabajo de personas sin hogar que, en la actualidad, residen en el Centro de Reinserción. El martes 30 de mayo se presentó la campaña ‘Junt@s. Actuemos hoy por un mañana mejor’ sobre ecología integral. La actividad está facilitada y coordinada por María José Pérez de la Romana, del equipo de Sensibilización de Cáritas Española. En el acto estuvo presente nuestro Obispo que también trasladó un mensaje de agradecimiento y esperanza a los presentes. Por la tarde, la doctora Carmen Sánchez Alegría impartió una conferencia ‘Maletín de Urgencias para el Alma’. El miércoles se instaló una carpa en la Plaza Mayor de Plasencia, en la que informaron sobre la actividad de Cáritas. Por último, la mesa de experiencia de beneficiarios y
voluntarios del jueves.Miguel Ángel Aparicio (Usuario de los pisos de vida autónoma)
Llegó a Cáritas Diocesana de Plasencia en el año 2020, después de tocar fondo varias veces, aunque si algo ha aprendido en todo este proceso es que “ni el infierno tiene fondo ni el cielo techo”. En la actualidad ya está en la tercera fase del programa de reinserción para personas sin hogar, ‘Volver a Ser’. “Me encanta este término, porque yo he empezado a “volver a ser” más que un usuario, me siento un beneficiario. Gracias a Cáritas trabajo en un proyecto de reciclado de ropa y, la verdad, es que me ha cambiado la vida por completo”.
Jennifer Cardona (Pisos de acogida para inmigrantes)
Jennifer Cardona, colombiana de 35 años y madre soltera de un niño, llegaba a España “el 23 de febrero de 2022”. Lo hizo huyendo de “problemas de inseguridad y violencia en mi país”. Recorrió media España sin encontrar ayuda hasta que en julio de ese año recaló en Plasencia y don Juan Luis, párroco de El Salvador, puso a su disposición los pisos de acogida para inmigrantes con los que colabora también Cáritas. “He podido rehacer mi vida y tener esperanza y futuro, por eso sólo puedo tener palabras de agradecimiento”.
Beatriz González (Reinserción laboral de Cáritas)
Llegó un día a Cáritas en busca de ayuda y hoy reconoce ser otra persona. “Cuando llegué a Cáritas me acababa de separar y estaba en una etapa muy complicada de mi vida. Tenía una niña pequeña y no tenía quien cuidara de ella. Sin estudios y sin futuro laboral. Entré en el programa de Cáritas de inserción laboral. Me formé con ellos y logré graduarme hace un año en Educación Infantil y, en la actualidad, también estoy preparándome oposiciones”, relata emocionada pero sin perder una sonrisa que transmite paz y alegría.
Cecilia Sánchez Ramos (Voluntaria de Cáritas Diocesana)
“Comencé mi voluntariado en Cáritas en 2021 a raíz de mis estudios en integración social. Los acabé, hice mis prácticas formativas en el Centro de Inserción, en el centro de Acogida y en el Comedor Social y una vez que acabé, a día de hoy sigo manteniendo mi voluntariado colaborando en el comedor con la trabajadora social”, relata nerviosa. “Es
una satisfacción muy grande que me permite salir de esa burbuja en la que vivimos y no vemos, y poder visibilizar que vivimos una sociedad “falsa”. Si algo destaco es haber conocido la empatía”.