22 Abr Amadeo Rodríguez: «Hay que ser muy valientes para hacer hijo adoptivo a un obispo»
Hacía cinco años que Plasencia no nombraba un hijo adoptivo -el último fue el banquero Jesús Medina Ocaña-, y el centro cultural Las Claras se vistió de gala para la ocasión. Amadeo Rodríguez Magro, obispo de Plasencia desde 2003 hasta 2016 y actual prelado de Jaén, recibió ayer este reconocimiento, uno de los más altos que concede el municipio, y lo hizo tirando en su discurso de agradecimiento de la ironía que es uno de los rasgos distintivos de su carácter: «En los tiempos que corren hay que ser muy valientes para darle a un obispo una distinción como esta», afirmó.
Amadeo Rodríguez es consciente de que no todo el mundo en Plasencia ha aplaudido su nombramiento como hijo predilecto. En el pleno en el que se hizo oficial el pasado mes de septiembre votaron a favor el PP, Ciudadanos y Extremeños, mientras que el PSOE, grupo mayoritario de la oposición, se abstuvo, y el concejal de Plasencia en Común se ausentó durante la votación para evitar tener que pronunciarse. El propio obispo habló en su intervención de estas discrepancias: «Sé que para hacerme hijo adoptivo habéis recogido el sentir favorable de muchos cotejándolo, como es natural, con la indiferencia de algunos y el desacuerdo de otros», afirmó, y añadió: «Todas las opciones las respeto y agradezco. Los contrario sería poco evangélico. Recordad lo que dice Jesucristo, como una fuerte advertencia: ¡Ay si todo el mundo habla bien de vosotros’».
Amadeo Rodríguez tuvo palabras de agradecimiento para quienes han sido sus colaboradores en la Diócesis durante estos 13 años, y también para quienes le encaminaron en su carrera eclesiástica. Dijo tener presente que entre los motivos que le han valido este reconocimiento se encuentra su trabajo en favor del patrimonio cultural de Plasencia. Lamentó en ese sentido algunos proyectos iniciados por él que no se han visto aún materializados, sobre todo la exposición Las Edades del Hombre y la llegada de un centro adscrito de la Universidad Católica de Ávila (UCAV). Hizo gala de su condición de placentino de honor, distintivo que se comprometió a lucir dondequiera que vaya.
El acto comenzó con un breve repaso por parte de la cronista oficial de Plasencia, Esther Sánchez, de la historia de la Diócesis y de algunos de sus obispos más destacados. También intervino Francisco Rico Bayo, que sigue siendo el administrador diocesano hasta que el obispo electo, José Luis Retana, sea ordenado el próximo 24 de junio. Después el secretario del Ayuntamiento, Antonio Santibáñez, leyó el acuerdo de pleno sobre el nombramiento de hijo adoptivo, que califica al homenajeado de «gran gestor» y destaca su «preocupación por la herencia histórica artística de una de las Diócesis más antiguas del mundo».